El reconocido y prestigioso jurista Dr. Germán J. Bidart
Campos ha aportado para esta obra el estudio y evaluación del escrito de la
defensa en estos términos:
"Lo conocí a Arturo
Frondizi a comienzos del año 1951. Nos vimos unas pocas veces. Me impresiono su
enfoque agudo, su rapidez, su inteligencia lucida. Después no volví a verlo más.
"Ahora acabo de
leer su defensa por los episodios de fines de 1933. El era entonces muy joven,
y en esas paginas descubro la, misma sagacidad que comprobé anos mas tarde.
"Maneja muy bien
el estilo; los argumentos, con gran fuerza de convicción; rebate la
requisitoria fiscal. Su prolijo razonamiento no descuida nada. Incursiona en
las figuras penales que estaban en discusión en la causa, con profundo
conocimiento de la doctrina y la jurisprudencia. Es interesante su deslinde
entre los delitos comunes y los delitos políticos. Pero mas allá del defensor
ocasional en un proceso penal, subyace en la pieza un hondo espíritu
republicano, combativo por las instituciones democráticas, adverso a los
gobiernos de fuerza.
"La hora que
empezaba a vivir el país iba a prolongarse intermitentemente por espacio de
cincuenta años. Frondizi no podía saberlo entonces. Pero más allá de las profecías,
su captación de la realidad de la época lo llevaba a oponerse a procedimientos
que después iban a convertirse en corrientes. Las reacciones de un radicalismo
entonces perseguido se erguían airosamente, y Frondizi trataba de demostrar que
la represión penal era improcedente. No evade el preciso encuadre jurídico. No
hace literatura política. No se desmanda con párrafos peyorativos. El abogado
defensor conoce bien su faena, y la cumple hasta conseguir el éxito.
"Han pasado cinco
décadas, y el escrito podría ser reciente. Es claro, él no hacia apología de
golpes de estado ni de pronunciamientos militares. Cuando escribe que la maldad
o bondad de los ideales políticos que mueven a las revoluciones escapa a la consideración
legal, que es tarea del presente, para entrar en el terreno de la historia, que
es tarea del futuro, piensa en la circunstancia que rodeaba al proceso judicial
donde intervenía. Piensa en movimientos cívicos de resistencia a los
gobernantes de facto encaramados por la fuerza en el poder. Por eso, lo que
el dice no serviría de justificativo actual para auspiciar propensiones a las
rupturas constitucionales.
"Detrás de esta
defensa, asomaba el hombre que cubriría mas de medio siglo de vida política
argentina muy difícil; que seria Presidente de la Republica; que sufriría el
derrocamiento y el arresto político; que volvería a la lid. Y el que a mediados
de 1955 haría escuchar por radio, en una transitoria apertura inusitada, la
palabra que el gobierno de turno le dejaba en libertad para convocar a la
democracia. No es nuestro propósito juzgar a Frondizi político y hombre de
partido. Pero si destacar su presencia en el temprano camino de 1933, del que
hoy creemos estar de regreso con el acompañamiento de cuantos saben que fuera
de la constitución no hay senda civilizada".
Fuente: Comentarios del Dr. Germán Bidart Campos al “Proceso
de Rebelión” Escritos Fundamentales del defensor Arturo Frondizi, 29 de diciembre de 1933 en Arturo
Frondizi, historia y problemática de un estadista Tomo III “Su actuación en la
UCR (1930-1956), Editorial Depalma, 1983.
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