El MAY cumple su primer año de militancia como línea interna
de la Unión Cívica Radical. Desde el 29 de mayo de 1982 la historia de la Nación
y la realidad del partido justifican nuestro nacimiento; sigue la Republica en
el marco del despotismo y sigue la UCR con miedo para interpretar la revolución
social y democrática nacionalista que los argentinos esperan.
En un año el MAY ha producido las actitudes y definiciones
que lo ubican como la conciencia de un radicalismo histórico que no puede esquematizarse
en estrategias de coyuntura o tácticas circunstanciales.
La UCR debe realizar el cambio transformador de todo un
sistema en crisis. Debe ser un reclamo permanente contra lo explotación del
privilegio económico. Combatir el disfraz totalitario.
Pretendemos que la UCR analice en el seno mismo de sus
afiliados y sin limitaciones su lugar en el presente y su proyección hacia el
futuro.
Debemos tener conciencia de la responsabilidad del radicalismo
en dimensionar la unidad nacional y orientar programaticamente la estructuración
de una nueva sociedad, para la que ya no son alternativas las causas de todas
las miserias del hombre.
Esta nueva sociedad debe ser el molde cierto de un mundo
argentino con hombres definitivamente libres, resultantes de una economía
emancipada y de una cultura con vigencia como para responder al desafío contemporáneo
de integrarnos en la patria continental con los pueblos latinoamericanos.
Pretendemos analizar con profundad la realidad que vivimos,
descubrir los nuevos métodos políticos que derroten la frustración, imaginar
respuestas nuevas y afirmar una conducción que coloque a la UCR en la apertura
integrante con lo nacional, popular, federal y democrático.
De nuestro acierto e intransigencia dependerá que la UCR
pueda convertirse en alternativa para los tiempos que vienen. Convocamos al
pueblo y a los radicales o acompañarnos, vengan de donde vengan y estén donde estén.
El doctor Luis A. León sintetiza nuestra fe. Somos militancia de la causa
nacional que aspira a soldar moralmente el tronco histórico del radicalismo con
la Nación.
Convocamos al coraje de compartir como germen de paz la
voluntad transformadora de las nuevas generaciones.
Convocamos a usted para colocarnos en la vanguardia
gravitante de una Argentina con prestigio externo y libertades adentro.
El MAY, a un año de su gestación, no declinara su compromiso
de dar a la UCR la audacia y lo inteligencia necesarias para pasar a la
ofensiva anticolonial y rescatar al pueblo de las fauces extranjerizantes de la
corrupción.
A un año de nuestro compromiso fundacional sigue en pie el “régimen”
y nuestro compromiso en derrotarlo. Para ello, como antes, creemos que es
impostergable yrigoyenizar al radicalismo para poder radicalizar la Nación. Los
que busquen la patria que se queden, los que solo busquen el poder que sigan.
El MAY seguirá siendo intransigente porque nuestra pretensión es hacer
radicalismo siempre.
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