Reproducen hoy los constitucionales de Santa Fe lo que
hicieron los cívicos cuando la revolución radical en la provincia de Buenos
Aires.
Me solicitó una conferencia en Temperley el señor Demaría
con el propósito de una acción conjunta. La rechace de inmediato, convencido de
que en el fondo se perseguía un nuevo 'acuerdo'.
De esos que ellos denominan 'patrióticos' y que yo califico
simplemente de 'utilitarios' Pero el intermediario que lo era el distinguido
militar Don Tiburcio Aldao, insistió en que lo escuchara, asegurándome que
trataba de confundirse incondicionalmente con nosotros en la acción, en forma
elevada y patriótica, accedí a su empeño, pero con la condición de que el
estuviera presente en la conferencia, para que mejor se convenciera de su
error.
Llegó el señor Demaría y, como lo había supuesto, me propuso
constituir una sociedad política a base de un 'acuerdo' Di inmediatamente por
terminada la entrevista, y el señor Aldao todo confundido, me declaro entonces:
"Tenia usted
razón, doctor; yo los creía mas grandes"
Con que así, hay que estar dispuestos a realizar solos la
obra, ya que esta exige, para culminar, la cumbre alta, bañada en las
esplendidez de un sol sin mácula.
Fuente: "Una ánecdota sobre el
acuerdo" en "El Dr. Hipólito Irigoyen: intimidades
políticas" de Alfredo Acosta, 1918.
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