Traigo el saludo cordial y fraterno de los correligionarios
de Córdoba, que no conoce de decepciones, debilidades y deslealtades.
En el radicalismo los más representativos dirigentes se
unen, sin distinción de corrientes y orientaciones.
Unidos, harán la salvación de la patria en esta hora, como
en otras. No aceptamos candidatos que se envíen por encomienda. Defendemos la
democracia interna y externa. Nosotros los radicales, luego de una lucha
caballeresca en nuestro partido, estamos unidos en la lucha cívica contra la
Dictadura.
Con respecto a la política del descamisado que el gobierno
explota, nadie sabe más de descamisados que nosotros mismos. Nosotros hemos
proclamado una lista donde incluimos a Del Castillo, empobrecido después de su
conocida actuación política, a Illia que vive en una pieza de hospital, y a
otros candidatos todos los cuales trabajan en forma honrada y descamisada.
El Comando Radical digno y valiente tuvo actitudes de
algunos dirigentes del oficialismo. Perón arrastró la investidura de presidente
en un acto de baja politiquería en la provincia de Córdoba.
Los magnates del gobierno que han ido a codearse con Franco
no pueden hablarle a los radicales de descamisados.
Después de dos años el gobierno ordinario y totalitario,
gobierno venal, ha corrompido a un sector del país y lo ha sumido en la
ignorancia.
Se ha dado a un sector del pueblo un mendrugo más y una
botella mas de alcohol.
El gobierno es una dictadura brutal y son graves la hora que
se avecina en nuestra política internacional, porque fuimos neutrales en dos
guerras y en la tercera los argentinos por culpa de este gobierno, deberemos
tomas posiciones en un bando.
Los que antes decían Braden o Perón, son ahora los primeros
en lústrale los zapatos a Braden.
Hoy pagan la culpa de su totalitarismo. Están arrodillados ante los magnates del norte. No puede ser que admitamos que se nos ponga junto al norte para combatir contra Rusia, o junto a esta para combatir contra el norte.
Somos enemigos de la guerra: no queremos cañones ni queremos
cuarteles. No queremos que una sola gota de sangre argentina se vierta en el
futuro gran desastre.
Que no vengan estos dictadores, como otros dictadores del
mundo, a comprometer nuestra situación en las fronteras. (¡Viva Yrigoyen!,
¡Viva Yrigoyen!)
Con respecto al campo argentino, antes era Bunge y Born el
explotador y hoy el explotador es el presidente, que se ha convertido en el único
Bunge y Born del país.
Tengo fe absoluta en el pueblo, la labor del bloque
parlamentario radical. El radicalismo necesita romper los dos tercios de la mayoría
obsecuente.
El radicalismo de Córdoba se esta jugando y que en cuanto
afloje esta situación de vacas gordas disminuirán los votos y serán arregladas
las cuentas con el dictador.
Se han hecho ofrecimientos a hombres del radicalismo y que
el pueblo debe saber bien que esos ofrecimientos han sido rotundamente
rechazados con altivez y dignidad. (¡Aplausos!)
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